El FROB 'regala' a Medel otros 241 millones para salvar la fusión de Unicaja con Ceiss
El consejo de administración de Unicaja, en su reunión de este martes, ha aceptado seguir adelante con la absorción de Ceiss
(Caja España-Duero) pese a no alcanzar el 75% de las preferentes y
subordinada de esta entidad al que estaba condicionada la oferta de la
entidad andaluza, como adelantó El Confidencial . De hecho, la aceptación del canje se ha quedado en el 60,66%. No obstante, para ello, la entidad presidida por Braulio Medel ha
exigido que el FROB aporte hasta 241 millones para cubrir el posible
déficit de capital provocado por las demandas de los preferentistas que
no han acudido al canje, y que también cubra el llamado 'riesgo Sareb'
por otros 200 millones más. Y ha puesto como fecha tope el 31 de marzo
para alcanzar todos los acuerdos necesarios. Asimismo, habrá un 5%
adicional de reducción de oficinas y de plantilla de la entidad
castellano-leonesa.
La condición sine qua non impuesta
por Medel para efectuar la absorción de Ceiss es que el canje de los
bonos de Ceiss que recibieron los antiguos titulares de los híbridos por
los CoCos (bonos convertibles contingentes) de Unicaja genere un capital de 1.250 millones,
algo que estaría garantizado si hubiera acudido más del 75%. El
problema es que, con una aceptación tan baja, las demandas de los que no
han acudido pueden provocar unas indemnizaciones que reduzcan el
capital por debajo de esa cifra.
Ante los problemas para llegar a
ese 75% por las malas condiciones del canje para los preferentistas, el
FROB y el Banco de España buscaron una solución que permitiera a Medel seguir adelante con la operación aunque no se cumpliera esa condición. Dicha solución suponía contar con un colchón adicional para cubrir los posibles litigios de los titulares de estos valores que no acudan a la oferta ni
al arbitraje y garantizar en todo caso los 1.250 millones. Finalmente,
el FROB cubrirá el 71% de ese importe y Unicaja el 39%, y la aportación
máxima del fondo público superará los 200 millones previstos: podrá
llegar hasta 319, pero se establece un complejo mecanismo de
compensación por el que el fondo público recibirá valores de Ceiss que
minorarán ese importe hasta 241 millones, según se explica en un hecho relevante remitido el martes por la noche a la CNMV.
Asimismo, Medel ha arrancado otros 200 millones para cubrir el llamado 'riesgo Sareb'
(posibles diferencias de valoración con el precio pagado por el banco
malo a Ceiss por sus activos inmobiliarios), del que se hará cargo el
FROB entre 40 y 240 millones, como también adelantó este medio en abril
del año pasado. La posición de fuerza del banquero sevillano queda
patente porque impone una fecha tope, el 31 de marzo,
para cerrar todos estos acuerdos y contar con los permisos necesarios;
en caso contrario, desistirá de la operación. Y también ha obligado al
FROB a aceptar un mecanismo de compensación -para reducir su aportación
de 319 a 241 millones- que consiste en entregarle acciones de Ceiss que
el fondo público debe vender con una serie de estrictas condiciones (no a
otra entidad financiera, no más del 1% a un solo inversor, en paquetes
pequeños...).
El presidente del FROB, Fernando Restoy. (EFE)
Todas estas aportaciones requieren la aprobación del comisario Joaquín Almunia, que hasta ahora se negaba a que se inyectara más dinero público en Ceiss. Hay que recordar que estas garantías se suman a las ayudas públicas de 1.129 millones recibidas
hasta ahora por Ceiss, 525 del FROB 1 y 604 del rescate europeo. Este
volumen hacía que Almunia se resistiera a aprobar los planes del FROB.
Además, los 241 millones nuevos (y los 200 del riesgo Sareb) no están
incluidos dentro del rescate a España, y se solicitan después de que la
troika haya dado por finalizada su misión en nuestro país. El argumento
del FROB es que la fusión con Unicaja es la opción más barata para el
contribuyente y que cualquier otra –nacionalización y posterior venta o
liquidación– requerirría de mayores recursos públicos. Según Unicaja,
Bruselas ha remitido una carta en la que admite de forma preliminar que estas condiciones no vulneran la normativa de ayudas de Estado.
De momento, estas ayudas conllevan una modificación del term sheet (hoja
de ruta) de la reestructuración de Ceiss que implica una reducción
adicional del 15% de su balance, del 10% de su cartera crediticia, del 5% de sus oficinas y del 5% de su plantilla
(los despidos previstos hasta el 31 de diciembre de este año se
mantendrán intactos, pero habrá otro ERE antes del fin de 2016).
En
todo caso, Unicaja se desentiende de ese problema: la comunicación que
emitirá esta tarde el consejo recoge su voluntad de seguir adelante y
deja en el tejado del FROB y del Gobierno español el entendimiento con Bruselas para
el buen fin de la operación; es decir, si después de todo la fusión se
cae, no será culpa suya, sino del FROB. No obstante, las fuentes
consultadas aseguran que "el visto bueno de Bruselas está encarrilado".
Los preferentistas dan la espalda a Unicaja
Se trata de la operación más larga del proceso de reestructuración de la banca española, puesto que comenzó en abril de 2011,
y desde entonces los continuos cambios de normativa y las exigencias de
Medel habían hecho imposible culminar la operación que ahora
fructifica.
La pobre aceptación del canje deriva de que la oferta
de Unicaja era muy pobre inicialmente –suponía una segunda quita después
del canje inicial de los híbridos por CoCos de Ceiss– y que los intentos de mejorarla posteriormente han sido muy confusos y atropellados:
primero se puso en marcha un arbitraje, pero exigía renunciar a las
acciones judiciales antes de saber si iba a ser favorable; luego se
habilitó un simulador para solventar ese problema, pero apenas se le dio
difusión y muchos afectados desconocen su existencia; finalmente,
Unicaja incluso ofreció a los rechazados en el arbitraje recuperar el
53% de su dinero. Pero la CNMV incluyó una serie de advertencias en el
folleto de la oferta y las asociaciones de afectados y los abogados que
buscan hacer negocio –el arbitraje es gratuito y no requiere letrado–
aconsejaron no acudir al canje.
Finalmente, el FROB admitió que los que cumplen los criterios de los otros arbitrajes (como el de Bankia) tendrán derecho a otro proceso en el que recuperarán su dinero con una parte mayor en efectivo aunque no salga adelante la fusión,
lo que eliminaba gran parte del incentivo para acudir al canje, si bien
tardará más y los criterios serán más estrictos que el arbitraje
actual. Por tanto, era imposible que se alcanzara el 75% de aceptación
cuando el 10 de enero sólo habían dicho sí el 50% de los afectados.
FUENTE: www.elconfidencial.com